8 soluciones de la inteligencia artificial en tus manos

La inteligencia artificial es la tecnología que le permite a las máquinas simular algunas funciones cognitivas propias de los humanos, como razonar, aprender, entender, comunicarse y resolver problemas. Su objetivo es apoyar a las personas en tareas repetitivas, riesgosas o arduas que pueden automatizarse. La inteligencia artificial es la tecnología del presente y del futuro: ya ha transformado algunas industrias, como finanzas, mercadeo, salud y comercio.

Gigantes tecnológicos como Google, Facebook, Microsoft y Amazon invierten desde hace años en inteligencia artificial. Esta tecnología permite desarrollar productos, plataformas o soluciones que pueden ser adquiridos por otras empresas. Los productos de inteligencia artificial están directamente relacionados con habilidades como el reconocimiento de voz, el procesamiento de lenguaje natural y la visión artificial.

Las gigantes tecnológicas, así como algunos startups, disponen de servicios de computación en la nube que se pagan por uso (algunos son gratuitos), y permiten a otras compañías incorporar herramientas o algoritmos de aprendizaje automático en sus líneas de negocio. Pueden, por ejemplo, adquirir el algoritmo de visión artificial de Microsoft y añadirlo en una aplicación para dispositivos móviles inteligentes.

La inteligencia artificial necesita tres componentes para funcionar: algoritmos, potencia computacional, y almacenamiento y procesamiento de grandes cantidades de datos. Esos tres elementos requieren infraestructura, manejo de programas complejos y grandes inversiones que superan el presupuesto de la mayoría de las empresas. Las organizaciones que no tienen la capacidad para desarrollar sus propios productos de inteligencia artificial recurren a productos de terceros o a sistemas de código abierto. En otros casos se deja en manos de expertos el desarrollo de esta tecnología: se emplean soluciones disponibles en el mercado y con eficacia comprobada, para enfocarse en otras áreas del negocio.

Las grandes empresas mencionadas anteriormente ponen al alcance de cualquier organización costosas tecnologías. Para ello emplean servicios de computación en la nube (una forma asequible de aprovechar los grandes recursos de otros y ajustarlos de acuerdo con las propias necesidades), API (interfaces de desarrollo de aplicaciones, por sus siglas en inglés: un conjunto de procedimientos que ponen a disposición una biblioteca para que sea utilizada por otro software) o bibliotecas o sistemas de código abierto para desarrolladores.

A continuación, se presentan algunas de las plataformas que hacen que la inteligencia artificial sea más accesible para programadores y empresas:

Infraestructura (almacenamiento de datos, redes, máquinas) y desarrollo (backend para aplicaciones web, CMS para la creación de webs, herramientas de aprendizaje automático y análisis predictivo, entre otras funcionalidades).

Microsoft Azure Machine Learning, por ejemplo, ofrece herramientas automatizadas, sin necesidad de programación, para que las empresas creen e implementen sus propios modelos de aprendizaje automático.

Microsoft Azure Machine Learning es utilizado por Xbox, Bing, BMW y Tesla, entre otras compañías. Se paga por los recursos que se utilicen.

Para ello usa herramientas de comprensión del lenguaje que crean conversaciones naturales y reales como si fuesen productos de la interacción humana y no de una máquina.

El sistema aprovecha el conocimiento adquirido de enciclopedias, estados del tiempo, noticias, o reservas y horarios de vuelos.

Algunas de las empresas que aprovechan esta plataforma son Domino’s Pizza, Singapore Airlines, Mercedes-Benz y The Wall Street Journal. Tiene dos planes para empresas: gratuito con funciones limitadas y de pago por uso.

Plataforma que utiliza algoritmos de aprendizaje automático y análisis estadístico profundo para detectar errores de programación.

Apoya a los desarrolladores en sus tareas.

Su campo de acción es el procesamiento de lenguaje natural en diseño de aplicaciones, robótica o plataformas de mensajería automática.

Convierte el lenguaje natural en el formato de intercambio de datos JSON (JavaScript Object Notation), sistema con el que trabajan los desarrolladores.

Tiene capacidades cognitivas superiores a otras plataformas, puesto que no es necesario programarla. Está diseñada para razonar, resolver problemas y tomar decisiones para cualquier problema humano, por lo que puede ser usada en cualquier área.

En la salud, por ejemplo, se ha utilizado para ofrecer consejos sobre el tratamiento del cáncer a partir de un análisis del genoma y está asociado con Quest Diagnostics, un servicio de salud que atiende 70% de los casos de cáncer en Estados Unidos.

IBM Watson NLP, por su parte, ofrece procesamiento del lenguaje natural para análisis avanzado de textos. La automotriz Honda la usa para atender clientes, mientras que General Motors para comprender las preferencias de sus clientes y mejorar sus acciones de marketing y así muchas otras empresas que adaptan sus funciones según sus requerimientos inmediatos. Tiene distintos planes de pago, según las necesidades.

Analiza los datos y la información de la empresa para sugerirle modelos de aprendizaje automático y sistemas de cómputo capaces de adaptarse a sus necesidades, de primera calidad y sin necesidad de tener conocimientos avanzados en inteligencia artificial.

Pertenece a la plataforma Google Cloud, en donde los usuarios pueden desarrollar aplicaciones personalizadas. Entre sus clientes se encuentran la tienda de productos de Disney y la marca de ropa de cama California Design Den.

Es una plataforma de aprendizaje automático desarrollada por el startup israelí Voyager. Entre sus funciones está la evaluación de riesgos, la protección ante el fraude, las interfaces de programación y los algoritmos de aprendizaje que extraen información del comportamiento humano en tiempo real. Es una herramienta muy utilizada en el mundo financiero y en los comercios. El conocimiento profundo sobre los clientes permite tomar decisiones precisas y acertadas que se adecúan a sus gustos y a las tendencias del mercado.

Su objetivo es apoyar a los desarrolladores en el uso de inteligencia artificial y facilitar la creación de productos que incorporen esta tecnología. TensorFlow, por ejemplo, construye y entrena sistemas de redes neuronales, que relacionan varios datos en red, de forma simultánea, como si lo hiciera el cerebro humano.

Accenture investigó el impacto de la inteligencia artificial en doce países desarrollados. Su estudio reveló que podría duplicar las tasas de crecimiento económico para 2035 y aumentar su productividad en un 40%.

Las plataformas de inteligencia artificial y aprendizaje automático son de gran ayuda para las empresas que prefieren ahorrar recursos con la utilización de códigos predefinidos y probados que satisfacen sus necesidades. Además, estas plataformas apoyan la labor de los programadores ya que les permiten enfocarse en lo especifico de la solución que están creando y avanzar rápidamente en los procesos de producción.

Se trata de una relación ganar-ganar: las empresas aprovechan las ventajas competitivas de estas tecnologías y los desarrolladores de estos modelos ganan dinero, pero también capacitación y asesoría en algún procedimiento que las empresas sepan hacer y que permita que la máquina aprenda. De esa forma, los desarrolladores encuentran alternativas que robustecen sus productos y llevan esta tecnología a grados más avanzados.