Sabana blues, arándanos colombianos a grito de ¡eureka!
Sabana blues, arándanos colombianos a grito de ¡eureka!
Un proyecto en Arcabuco, Boyacá, logró la licencia para producir Eureka Sunrise, una de las variedades más provocativas de arándanos en el mundo, otorgada por la empresa australiana MBO. La calidad innegable de su producto, la sostenibilidad de sus cultivos y su política de generación de empleo son algunos de los puntos que llamó la atención del programa En Campo de la Fundación Bancolombia, que hoy lo alienta con financiación, mentorías y grandes sinergias.
Sobre la tierra de Arcabuco, Boyacá, alimentada por el aire puro del altiplano y su luminosidad, crecen los cultivos de arándanos de la familia Duque. Allí, en el año 2018, nació Sabana Blues, una empresa productora y comercializadora de Eureka Sunrise (variedad única en Colombia), con raíces bien cimentadas en una herencia agrícola y dirigida por Andrés Duque, quien encontró una oportunidad de negocio al ver que la demanda de arándanos de alta calidad crecía de manera sostenida en el mundo.
Los Duque fueron pioneros en la producción de plantas de arándano y en el desarrollo de la tecnología de cultivos en bolsa con sustrato en el país, que trajeron de sus visitas a Chile y Perú. Esto llevó a que rápidamente los medios y portales internacionales especializados en el cultivo de frutas y verduras les pusieran los ojos encima.
Justamente, fue gracias a una entrevista que, en el año 2016, la compañía australiana MBO contactó a Andrés Duque para ofrecerle la licencia comercial y su portafolio de variedades, entre ellas, Eureka Sunrise, que en Colombia no se había visto jamás: más grande, dulce y crocante (incluso fue premiada por el Internacional Taste Institute con base en Bélgica por su extraordinario sabor). La propuesta sonó igual de apetitosa y, como los Duque sabían que una variedad de este tipo era la puerta de entrada al mercado, tomaron la decisión de invertir y buscar una buena tierra para ser productores.
Para 2020, Sabana Blues ya tenía sembradas las primeras seis hectáreas, con las que buscaba ver cómo se comportaban dichas plantas en Colombia. Al año siguiente, tras una experiencia de exportación a Estados Unidos, Andrés y su padre entendieron que debían concentrarse en el mercado local que había quedado fascinado con el tipo de arándano que ofrecían.
En diciembre de 2022, habiendo logrado la estabilidad del cultivo, se postularon con otras 1000 empresas al programa En Campo de la Fundación Bancolombia y Portafolio Verde, que busca contribuir con mentorías de expertos y financiación a las compañías que trabajan de corazón por mejorar la tecnificación y la calidad de vida en los campos colombianos. Actualmente, Sabana Blues hace parte de las 15 organizaciones elegidas con apoyo en estructuración financiera.
La relación con Bancolombia viene de atrás. Inició en 2018 y desde entonces ha sido el único banco que ha acompañado a la empresa. Con Bancolombia, Sabana Blues maneja la nómina, porque es de fácil de acceso en las zonas rurales y tiene herramientas como la plataforma Bancolombia A la mano que incorpora a proveedores y empleados al sistema financiero, con lo cual, no es solo más sencillo para ellos hacer y recibir transacciones, sino que les permite obtener préstamos con los que podrán mejorar su calidad de vida. Además, con créditos de la línea Finagro Sabana Blues ha podido apalancarse para crecimiento y capital de trabajo.
En sintonía con la igualdad de género, el empleo decente, el crecimiento económico, la producción y el consumo responsable (todos objetivos de desarrollo sostenible de las Naciones Unidas) hoy 37 personas trabajan de forma directa con Sabana Blues, de los cuales 23 son mujeres cabeza de hogar. En el cultivo, además de tener un empleo estable con prestaciones legales, los colaboradores reciben almuerzo diario. A quienes han hecho carrera y llegado a supervisores, la compañía asume el arriendo de sus hogares (actualmente, cuatro colaboradores tienen este beneficio).
“Pero no solo el equipo directo siente el progreso. Más de 80 familias de Arcabuco se ven beneficiadas indirectamente de la economía que mueve el cultivo, además de otras 14 en Cucunubá, Cundinamarca, gracias a la alianza con un productor de nuestro programa a quien le damos asistencia técnica y comercializamos su producción”, afirma Andrés.
Entre las seis hectáreas sembradas en Arcabuco y las dos de Cucunubá, Sabana Blues captura 160 toneladas métricas de CO₂ por año, haciendo también de esta una empresa comprometida con el medioambiente. Y si todo sale según los planes, para julio de 2024 tendrán 15 hectáreas sembradas, lo cual no solo le permitirá capturar 300 toneladas de CO₂, además le dará empleo directo a cerca de 50 personas y a otros 120 de manera indirecta, manteniendo activa la rueda del progreso y la sostenibilidad en Colombia.
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