Claves y requisitos para exportar naranja a Estados Unidos, Puerto Rico y otros mercados

En Colombia, el mayor porcentaje de cítricos sembrados corresponde a naranjas, una fruta apetecida tanto en el mercado nacional como en los países vecinos, y que desde hace algunos años está seduciendo paladares en Estados Unidos y Puerto Rico. Para triunfar en este negocio, los productores y exportadores deben tener en cuenta algunas medidas. ¡Conócelas aquí!

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Contenido del artículo

1. Las cifras sobre exportación de naranja Colombiana
2. Requisitos para exportar naranja a Estados Unidos y Puerto Rico
3. Claves para suplir la demanda de naranja en el exterior

Las cifras sobre exportación de naranja colombiana

Las naranjas colombianas, sobre todo las que se cosechan en el Eje Cafetero, Antioquia y Valle del Cauca, están seduciendo los paladares de nuestros vecinos cercanos como los ecuatorianos, los de las islas del Caribe y ahora a los estadounidenses.

Con el fin de abrir mercados para los citricultores colombianos, entidades como el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) y el Ministerio de Agricultura se han dado a la tarea de apoyar a los exportadores en distintas fases del proceso de producción para que puedan llegar con una oferta competitiva a otros destinos.

Gracias a estas estrategias, el número de toneladas de naranja exportadas en los últimos años ha crecido significativamente. De acuerdo con el ICA, mientras en 2018 se exportaron 11.268 toneladas de esta fruta, en 2019 fueron 13.937 toneladas lo que representó un crecimiento superior al 26%.

La mayor exportación se registró a Ecuador, que representa un 74% del total del mercado internacional. En porcentajes menores se encuentran algunas de las islas de las Antillas, como Guadalupe, a donde llegó el 13% de la producción destinada a la exportación; Martinica, con el 6%, Guyana Francesa y Curazao, con menos del 1% cada uno.

Estados Unidos y Puerto Rico también han disfrutado el dulce sabor de las naranjas colombianas; este mercado se abrió en 2017 luego de que el ICA liderara el proceso de cumplimiento tanto de requisitos como de actualizaciones que se les solicitaban a productores y exportadores nacionales.

“Avales como este les dan mayores posibilidades de comercialización, pero también los obligan a establecer pautas de calidad para cumplir con los requerimientos de ese tipo de mercados”, afirma Emilio Arévalo Peñaranda, director técnico de epidemiología y vigilancia fitosanitaria del ICA. Estos procesos de negociación fitosanitaria son logros compartidos con otras entidades del gobierno.

Hoy el mercado estadounidense representa el 3,16% de las exportaciones de naranja colombiana, un porcentaje que puede crecer en la medida en que se logre que más predios cumplan con los requisitos para enviar su producto al exterior. Hasta ahora, la mayoría de predios habilitados para realizar esa actividad se encuentran en el Eje Cafetero, Antioquia y Valle del Cauca.

Precisamente, durante 2019 se exportaron 2.300 toneladas de naranja vallecaucana cultivada en los municipios de Alcalá, Caicedonia y Andalucía, entre otros. A Ecuador se despacharon 2.027 toneladas y a Estados Unidos se fueron otras 26 toneladas, lo que representó un 16,5% del total de las exportaciones nacionales realizadas durante ese año.

Según datos entregados por Asohofrucol, las exportaciones de naranjas colombianas a Puerto Rico crecieron el 78% en valor, entre 2018 y 2019, llegando a los USD 359.000.

Por otro lado, las denominadas limas ácidas, que son el limón común y tahití, tienen un mercado internacional muy importante en Europa, Medio Oriente y Estados Unidos, y obtuvieron una victoria con la negociación que logró el ICA para su admisión a la Unión Europea, con vigilancia de la entidad y declaraciones que se deben incluir en los certificados.

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Dos requisitos para exportar naranja a Estados Unidos y Puerto Rico

Teniendo en cuenta las altas exigencias de calidad de Estados Unidos y Puerto Rico, el ICA ha estado comprometido en verificar el cumplimiento de los requisitos que deben cumplir las compañías colombianas que tienen el objetivo de ingresar a esos mercados con su oferta de naranjas.

De acuerdo con Emilio Arévalo Peñaranda, director técnico de epidemiología y vigilancia fitosanitaria de esa entidad, la primera exigencia es el tratamiento en frío de tipo cuarentenario. Éste se ejecuta con el fin de evitar el riesgo de que en un producto exportado vayan plagas como, por ejemplo, las moscas de la fruta.

El tratamiento en frío no debe confundirse con la cadena de frío o de conservación, ya que esta se activa cuando el producto se traslada a mercados cercanos, que no tienen exigencias de tratamientos cuarentenarios, y se refiere simplemente al proceso que se sigue para conservar la calidad de la fruta.

El segundo requisito está relacionado con una serie de procedimientos que se hacen en campo para determinar los niveles de moscas de la fruta. Estos deben estar por debajo de unos índices establecidos para que el cargamento sea habilitado y se pueda dar curso a su exportación.

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7 claves para suplir la demanda de naranja en el exterior

Aparte de los requisitos obligatorios que los productores y exportadores colombianos deben cumplir para llegar con su oferta de naranja a mercados exigentes como el de Estados Unidos, el experto del ICA recomienda tener en cuenta los siguientes consejos:

• 1. Estándares de calidad. Escalar en el mejoramiento del sistema productivo para alcanzar estándares de calidad que exigen los destinos de interés con mayor potencial. Este proceso va desde la producción de la semilla, pasa por la agronomía del cultivo y la cosecha, y llega hasta la postcosecha.
• 2. Asesoría y acompañamiento. Aprovechar la asesoría y acompañamiento de las entidades del gobierno que promueven las exportaciones para obtener la calidad que requiere el importador o saber cuál es la mejor época para negociar con él.
   
• 3. Manejo de plagas. Promover el manejo integrado de plagas cuarentenarias en zonas amplias para mejorar su condición fitosanitaria, pues los esquemas de trabajo individuales no son eficaces para tratar dichas plagas, pero sí limitan la producción de una región o, incluso, del país.
• 4. Estar a la vanguardia. Aunque el acompañamiento del gobierno existe, los empresarios son los que marcan la pauta con respecto a la evolución que esperan para su sector. Un ejemplo de esto es lo que ocurrió con el aguacate Hass: de ser una incipiente industria pasó a ser una cadena en la que se optimizaron procesos como los de producción, empacado y postcosecha.
• 5. Nuevos mercados. Aunque Colombia no exporta naranja a Europa, el objetivo es analizar la pertinencia de ingresar a ese y otros mercados teniendo en cuenta criterios como los requerimientos que imponen a los importadores o la demanda por un producto específico.
   
• 6. Ver nuevas oportunidades de negocio. Sacar ventaja de circunstancias como impactos climáticos en un país o enfermedades que afecten sus cosechas, porque ahí hay oportunidades de negocio.
   
• 7. Cumplir requisitos fitosanitarios. Cumplir cada vez más con los esquemas fitosanitarios que permiten acceder a más mercados, mejorar la productividad y ser más competitivos en el entorno internacional.

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