Marca personal: 5 razones por las que debes crear una

La marca personal es el conjunto de percepciones o impresiones que el resto de las personas tiene sobre alguien. En el caso que nos interesa aquí, sobre el emprendedor. Para Jeff Bezos, CEO de Amazon, es “lo que dicen de ti cuando tú no estás presente”. 

Trabajar en la marca personal no es una opción, sino una obligación, en un mundo tan competitivo. Para emprender no solo se toma en cuenta la idea sino la personalidad y el carácter de quien la va a ejecutar. Así como se vende la idea, debe venderse a quien la crea, alguien que debe irradiar confianza, determinación y conocimiento.

Construir una marca personal no se hace de un día para otro. Implica tiempo, dedicación, paciencia y estrategia. Tiene, también, un valor agregado: es una manera que el emprendedor posee para diferenciarse de los demás, que exige autoconocimiento. ¿Quién es? ¿Qué aporta al mercado? ¿Cuáles son sus virtudes y defectos? Estas son algunas de las preguntas básicas que debe plantearse para transmitir sus cualidades únicas y avanzar en la construcción de su marca personal.

¿Cómo se aplica la marca personal al mundo del emprendimiento y cuál es su importancia?

La marca personal es la representación tangible de una startup. El emprendedor es su imagen, por lo que debe construir un discurso transparente y cercano, capaz de inspirar confianza. De nada sirve el potencial de un proyecto si no tiene alguien que lo defienda con seguridad y pueda atraer la atención de inversores y clientes.

La marca personal, además, depende de las alianzas que se crean, la manera en que el emprendedor se relacione, las impresiones que causa en quienes lo conocen, las decisiones estratégicas para hacer crecer el negocio, entre otros factores.

Llegado a este punto, puede que siga preguntándose por qué favorecer la marca personal y no la corporativa en el mundo del emprendimiento. Y es que ponerle cara al negocio conlleva múltiples beneficios.

Por ejemplo, es difícil separar a Bezos de Amazon, Richard Branson de Virgin, Steve Jobs de Apple, Elon Musk de Tesla. Todos tienen algo en común: son personas reconocidas y exitosas. Cabe preguntarse cuántas personas han llegado a la marca por la figura de su fundador o qué sería de estos negocios sin el trabajo y las presentaciones que cada uno hizo para contribuir a su crecimiento.

Además de ese ejercicio que ilustra la importancia de la marca personal dentro del mundo de los negocios, estas son cinco razones por las que el emprendedor debe construir su marca personal:

1. Humaniza el proyecto, negocio o emprendimiento para inspirar confianza

Los clientes creen más en las personas que en las marcas. De acuerdo con un reporte de la consultora Nielsen, 92% de las personas confía más en la recomendación emitida por una persona que la que provenga de una compañía.

Solo las personas pueden hacer sentir a los clientes que son la solución, que los entienden y comparten sus inquietudes. Y como la marca personal define quién es el emprendedor, por qué hace lo que hace, cómo lo hace y cuáles son sus valores, existe mayor cercanía entre él y la audiencia. Si lo respetan y confían en su integridad, es más probable que le compren.

Las crisis, los problemas o las inquietudes, además, las resuelven personas de carne y hueso, con nombre y apellido. Tener a alguien que sea la imagen del emprendimiento –lo que le permite a la audiencia identificar a la persona que va a responder por ello– inspira confianza y profundiza la conexión entre la empresa y el cliente.

2. Consigue mayor visibilidad

Un negocio impulsado por la marca personal de su fundador o de sus trabajadores trae consigo muchas ventajas:

1. Como se comparten redes y recursos, se tiene acceso a mayor número de contactos y acuerdos comerciales. Por ejemplo, cuando los mensajes de una marca son compartidos por sus colaboradores en redes sociales, llegan a 561% más personas que los compartidos únicamente desde la cuenta de la empresa, según Forbes.
2. Logran atraer un mayor número de clientes mediante sus cuentas personales, lo que elimina la necesidad de hacer grandes inversiones en publicidad. Por ejemplo, Richard Branson tiene 3,7 millones de seguidores en Instagram, frente a los 155.000 de la cuenta de Virgin.

"El formato tradicional está obsoleto y son los tuits de los empleados los que atraen seguidores de una marca. Las personas son las que humanizan a las empresas y las acercan a clientes y consumidores", afirma Andrés Pérez Ortega, autor de varios libros sobre marca personal, citado por El País, de España.

3. Sobrevive a la empresa

Es sensato pensar en el futuro del emprendedor más allá del proyecto. En caso de adversidades o fracasos, la marca personal sobrevive a la profesional, porque está estrechamente ligada a la potencialidad del emprendedor y no solamente al proyecto.

Si la startup deja de existir o se desean hacer visibles varias iniciativas en simultáneo, la marca personal permanece. Musk, por ejemplo, es el cofundador de PayPal, Tesla Motors, SpaceX, entre otros, y es con su marca personal como ha logrado promover sus otros negocios.

4. Crea autoridad  

El desarrollo de una marca personal sólida, combinado con el contenido correcto, crea autoridad y reconocimiento entre los pares del sector. Para lograrlo, es necesario compartir conocimiento, información de calidad y aplicar el talento que posea para apoyar o solventar requerimientos, todo con un lenguaje adaptado al público al que se dirige, claro, conciso y que deje de lado los tecnicismos.

La marca personal, a su vez, es una herramienta muy útil a la hora de representar a la empresa en discursos y eventos: otra oportunidad de posicionarse como una autoridad en el campo y ganar la confianza de su base de clientes.

5. Se es fiel consigo mismo

La marca personal es un medio con el que el emprendedor puede mantenerse fiel a sí mismo y a su misión. La marca personal será un reflejo de sus creencias, valores y metas, que se supone deben estar alineadas con la filosofía de su empresa.

La marca personal muestra la autenticidad del emprendedor y, por tanto, de su negocio. No se trata de vender humo ni de inventar cualidades o habilidades que no se tienen, sino de descubrir qué elementos diferencian al emprendedor y saber cómo contárselo a los demás. Es necesario atenerse a ello para que las personas puedan ver que se es coherente y fiel al mensaje transmitido, pues las acciones y formas de actuar pueden añadir o quitar valor a la compañía.

Una marca personal establecida influye positivamente sobre la marca corporativa, en el sentido de que mejora el clima organizacional e impulsa a los colaboradores a ser embajadores de la empresa o la marca. “Los empleados con marca propia son autosuficientes y más innovadores. Son solucionadores de problemas y se comprometen a fondo con la marca corporativa”, sostiene Blaise James, consultor estratégico de marca de la encuestadora Gallup.

La construcción de una buena marca personal es el mayor activo de un emprendedor, porque puede darse a conocer tanto a sí mismo como al negocio, posicionar el proyecto, tener futuro en próximos emprendimientos o proyectos y permanecer en la mente de los clientes, quienes buscan contacto y cercanía humana.

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