Comercio internacional: ¿cuál ha sido el impacto del tránsito marítimo y qué se espera en el 2024?

Actualidad economica y sectorial02-07-2024

El comercio internacional empieza a dar muestras de recuperación luego de las consecuencias directas del conflicto en el mar Rojo. El tránsito y envío de buques a través del canal de Suez, por el que transita el 30 % del volumen del comercio mundial, tuvo dinámicas perjudiciales que se prolongaron por varias semanas, lo que conllevó a un aumento en los precios de los fletes marítimos.

Sumando a lo anterior, la escasez de alternativas (debido, por ejemplo, a la sequía del canal de Panamá) y al tránsito por nuevos corredores que demandan hasta 14 días más de tiempo para llegar a destino (como la ruta a través del Cabo de Buena Esperanza), hizo que en pocas semanas los fletes aumentaran significativamente, según el índice Drewry World Container Index.

La variación de precios de los fletes marítimos luego del cierre de servicios a través del canal de Suez y el mar Rojo, es similar a lo acontecido a mediados de 2021, cuando la reactivación económica trajo consigo una aceleración vehemente de la demanda agregada que no obtuvo respuesta similar sobre la oferta de bienes y condujo a fletes por encima de los diez mil dólares. La consecuencia fue evidente: solo hasta 2023 los precios por transportar contenedores alcanzaron niveles prepandemia.

A pesar de esta rememoración, luego del fuerte aumento de enero, los precios de los fletes se comportaron durante varios meses con tendencia a la baja, pero a un ritmo gradual, ubicándose en los 2.725 dólares el 2 de mayo de 2024, lo que demostró que los efectos de las disrupciones en los fletes marítimos empezaban a reducirse.

No obstante, entre mayo y junio el índice ha evidenciado constantes variaciones positivas, mostrando un aumento en el precio de los fletes nuevamente. Según analistas, este crecimiento se debe a la combinación de una demanda creciente en el mundo con la capacidad general del mercado totalmente empleada debido a los desvíos del mar Rojo.

Durante lo corrido de 2024, no solamente se han afectado los precios de los fletes, sino también la confiabilidad del calendario, presentada por Sea-Intelligence. A finales de 2023 e inicios de 2024 se registró una disminución significativa y a medida que las rutas alrededor de África se estabilizan, este indicador muestra cifras favorables: en abril de 2024 mejoró en 2,5 puntos porcentuales mensuales hasta alcanzar el 52,1 %.

Según Sea-Intelligence, cuando se producen retrasos en los buques, un porcentaje de la capacidad mundial de ellos se absorbe efectivamente y, por lo tanto, no está disponible para el mercado. Históricamente, este dato ha tendido a estar entre el 1 y el 3 %, con algunos picos en el rango del 3 al 5 %, debido a eventos disruptivos importantes. Por ejemplo, durante la pandemia, esta cifra estuvo cerca del 14 % en su punto máximo.

En marzo de 2024, la absorción de la flota por retrasos de buques fue del 5,7 % lo que representó una mejora notoria con respecto al pico reciente de enero de este año del 7,5 %. Como las rutas a través de África son cada vez más eficientes, la capacidad se utiliza completamente y aumenta la demanda, lo que ha supuesto un incremento en el precio de los fletes sin afectar la confiabilidad del cronograma.
 

Situación en el canal de Panamá

Durante varios meses, la vía navegable más importante de América Latina ha sufrido los impactos del fenómeno de El Niño. A diferencia del canal de Suez, el de Panamá se alimenta por el lago de agua dulce Gatún y sus niveles de sequía han reducido el tránsito diario a través de él. De acuerdo con la autoridad oficial del canal de Panamá, en 2023 el país afrontó el tercer año más seco de la zona desde que se comenzó a llevar registros hace 140 años.

A pesar de esto, las perspectivas sobre las precipitaciones son favorables y, si aumentan, el canal planea incrementar gradualmente los tránsitos diarios. Luego de los trabajos de mantenimiento programados en las esclusas de Gatún del 7 al 15 de mayo, lo que redujo el número de tránsitos (de 20 a 17 tránsitos por día), estos viajes se reacomodaron a partir de junio, sumando en total un tránsito de 32 buques diarios.

Por otro lado, desde el 15 de junio, el máximo calado permitido para los buques que transiten por las esclusas neopanamax es de 14.02 metros (46 pies). Este ajuste garantiza la navegación segura, al tiempo que considera las proyecciones del nivel del lago Gatún y otros requisitos operativos.

Es indudable que la situación en el canal ha mejorado en los últimos meses. Primero, el número de buques que transitarán por el lugar (aproximadamente 50 en total) está a la par con la cantidad esperada bajo las condiciones actuales, con 32 tránsitos disponibles diariamente. La mayoría de ellos tienen reservas y suelen llegar antes de la fecha asignada, por lo que es común que cuenten con combustible o reabastezcan sus suministros previamente. 

En segundo lugar, se espera que las precipitaciones aumenten en intensidad, lo que permitiría al canal volver a aumentar progresivamente los tránsitos diarios hasta alcanzar los 36.

En tercer lugar, el tiempo promedio de espera para los buques que llegan sin reservaciones este año ha sido de poco menos de 2.5 días, cifra muy inferior a los 3.6 días experimentados entre enero y marzo del año pasado, y a las registradas a finales de 2023, cuando alcanzaron un promedio superior a los 15 días de retraso.

¿Qué se espera del tránsito marítimo por el canal de Panamá?

El contexto anterior brinda importantes conclusiones. En primer lugar, se puede notar que la sustitución de capacidad a través la ruta del cabo de Buena Esperanza ha relajado los efectos adversos que sufrió el comercio internacional a partir de diciembre de 2023 y hasta los primeros meses de 2024.

No obstante, se ha evidenciado un incremento de las tarifas de los fletes desde mayo, no solo por el motivo mencionado anteriormente, sino también porque la demanda está mostrando un ligero crecimiento.

Por otra parte, y a pesar de las condiciones climáticas que enfrentó el canal durante el último año, este ha podido responder a la demanda actual y ha permitido un flujo constante de buques. Por supuesto, cuando lleguen las precipitaciones, es importante recordar que los patrones climáticos adversos tienen un impacto negativo en el comercio mundial, por lo que no solamente el canal de Panamá, sino todas las partes involucradas, deberán trabajar en conseguir soluciones a largo plazo.

Por ahora, en el corto plazo, el canal ha actuado responsablemente para ser una ruta marítima de vital importancia para el continente, y en caso de prolongarse los conflictos geopolíticos cada vez más crecientes, ser una alternativa real para los flujos de comercio internacional.

Para Colombia, es importante que las empresas que realizan operaciones de comercio exterior monitoreen estos indicadores, ya que pueden dar información precisa para tomar decisiones y planear la cadena logística de la organización, así como entender la dirección en que se negocian las tarifas de fletes marítimos, que determinará la magnitud de la demanda, y con ello el precio final de los bienes, ya sea de consumo, de materias primas o de capital.

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