Así ha impactado la salida de Viva Air y Ultra Air al turismo en Colombia

Actualidad economica y sectorial03-10-2023

Desde la aparición del modelo ‘low cost’ en el año 2012, con la creación de Viva, la primera aerolínea con este fundamento en el país, Colombia empezó a potencializar el sector aéreo y a democratizar este servicio.

Al cierre del año 2022, el transporte aéreo de pasajeros terminó con 47,9 millones de personas, lo que significó un incremento de alrededor de 17,4 millones de pasajeros frente a 2021. Allí, Viva Air logró una participación de 15 %, mientras que Ultra alcanzó 2 %.

Aunque el modelo se venía expandiendo en los últimos años, el pasado 28 de febrero de 2023 Viva Air anunció el cese de sus operaciones y apenas un mes más tarde Ultra Air actuó en la misma dirección; con esto, se generó una fuerte baja -sobre todo- en el mercado aéreo doméstico.

“La salida de Viva y Ultra no solo impactó la oferta de vuelos hacia diferentes destinos del país, sino también la disponibilidad de hoteles, centros turísticos, Airbnb y diferentes opciones de estadía. Además, hubo un impacto económico indirecto en actividades de entretenimiento, bares, restaurantes y centros comerciales”, relató John Alexis Chica, experto de Bancolombia. 

Según el consolidado de la Aeronáutica Civil de Colombia (Aerocivil), en el primer semestre de 2023 hubo una caída de 11,6 % en el número de pasajeros movilizados localmente en Colombia, pasando de 16 millones en 2022 a 14,1 millones de personas transportadas entre enero y junio de este año.

Las dificultades por esta coyuntura se sintieron no solo en el traumatismo que tuvieron que enfrentar los pasajeros, sino que el país también descendió del dinamismo acelerado con el que se venía consolidando en la región.

Desde Estambul, Turquía, en la cumbre de aerolíneas de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) que se llevó a cabo en junio de este año, el gremio más importante del sector resaltó que Colombia estaba liderando el crecimiento anual en el número de pasajeros en el mundo hasta febrero, pues al compararse con ese mismo mes de 2019 su variación había sido del 27,8 %.

México, que lo siguió de cerca alcanzó el 20,9 % y Argentina, que también terminó en positivo logró 3,9 %; mientras que Estados Unidos (-1 %), Brasil (-2,4 %) y Chile (-11,9 %) continuaban con variaciones negativas. 

Así como en el caso anterior, Colombia también estuvo punteando el crecimiento anual en el número de pasajeros del tráfico internacional, pues su alza en febrero había sido de 18,8 % y, junto con México (10,4 %), también venía siendo el único que superaba sus cifras prepandemia.

La participación de las ‘low cost’ en el mercado aéreo colombiano

La Dirección de Investigaciones Económicas de Bancolombia recopiló en un informe que en 2022 Viva Air llegó a cerca de siete millones de pasajeros con destinos nacionales, siendo los de mayor participación: Bogotá (22,4 %), Rionegro (22,2 %), Cartagena (13,1 %), San Andrés (8,6 %), Santa Marta (8,3 %), Cali (7 %) y otros (18,4 %). 

Entre enero y febrero de 2023, la empresa movió cerca de un millón más dentro del país hacia y desde Rionegro (25,1 %), Bogotá (22,5 %), Cartagena (12 %), Santa Marta (8,5 %), Cali (5,5 %), San Andrés (5,5 %) y otros (20,9 %). 

En cuanto a Ultra Air, el año anterior la aerolínea transportó a 1,4 millones de pasajeros en Bogotá (28 %), Rionegro (24,4 %), Cartagena (15 %), Santa Marta (11,4 %), Cali (10,3 %), San Andrés (6 %) y otros (4,8 %). 

Para el primer trimestre de este año, la empresa consolidó otros 585.200 pasajeros en Bogotá (28 %), Rionegro (25,9 %), Cali (11,9 %), Cartagena (11,1 %), Santa Marta (10,3 %), San Andrés (7,7 %) y otros (5,2 %).

Exceptuando a Bogotá, donde se concentra el mayor flujo de la operación aérea en Colombia, el impacto de la salida de las dos empresas low cost dejó dificultades importantes para los negocios conexos a estas.
 

Como este, Santa Marta es otro de los grandes destinos afectados, entendiendo la cantidad de vuelos que operaba Viva, especialmente. Omar García, presidente del capítulo Magdalena de la Asociación Hotelera y Turística de Colombia (Cotelco) comentó desde el primer instante de la suspensión de operaciones, que estas bajas generaban un impacto significativo en la región. 

Bancolombia agrega que, para el turismo, especialmente en San Andrés, fue una situación compleja ya que es un destino que no presentaba mayores alternativas aparte de llegar vía aérea, “por lo que fue una región que estuvo y está bastante afectada y año corrido hasta abril venía con una de las ocupaciones más bajas en los últimos años, con 51,7 %, una disminución de 19.6 puntos porcentuales según Cotelco”.

“A causa de esta problemática, la reducción de pasajeros en el transporte aéreo ha sido representativa y es que, a pesar de los esfuerzos del sector público y privado, aún el sector aéreo no termina de recuperarse”, aseguró Paula Cortés, presidente de la Asociación Colombiana de Agencias de Viajes y Turismo (Anato).

Por el comportamiento que ha venido reportando el sector, Anato calcula un crecimiento del 18 % en la llegada de visitantes no residentes y del 2 % en la salida de colombianos al exterior al finalizar 2023, comparado con 2022.

¿Qué llevó a la quiebra de Viva y Ultra? 

Al hacer un recuento sobre el sector, Bancolombia expuso que el transporte aéreo es un negocio que tiene varios riesgos asociados que no están bajo su control, como el precio del combustible que representa alrededor del 30 % de sus costos totales.

De hecho, Viva y Ultra al momento de su salida afirmaron que esta era una de las razones principales que había llevado a su salida del mercado, pues el encarecimiento de este renglón estaba haciendo que el negocio no fuera rentable.
 
De otro lado, y entendiendo que muchos de los aviones de ambas compañías estaban operando bajo el modelo de leasing, la deuda en dólares se triplicó e hizo que las compañías no pudieran responder.
 

Y aunque Viva, particularmente, no ingresó a ningún proceso de reorganización durante la pandemia como sí sucedió con otras empresas como Avianca, Latam o Easyfly, los coletazos del Covid-19 se han sentido en los últimos años y tuvieron consecuencias tanto para esta aerolínea, como para Ultra.

En este contexto, para el experto de Bancolombia es importante resaltar que ante la situación de Viva y Ultra las personas han optado por alternativas más costosas en el transporte aéreo como las que ofrecen otras empresas o por emplear transporte terrestre como una herramienta más económica para sus desplazamientos.

“Pero se espera también que otras empresas nuevas entren a competir y eso genere un precio a la baja de los tiquetes y nuevas alternativas para llegar a más destinos donde Viva y Ultra ya no son una opción”, finalizó Chica. 

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