Energía y agro: sectores impactados por fenómeno de El Niño en Colombia

Actualidad economica y sectorial01-08-2023

Luego de venir de una temporada de abundante agua y precipitaciones -propias del fenómeno de La Niña-, hoy Colombia se enfrenta a una segunda mitad de 2023 e inicio de 2024 caracterizada por condiciones de altas temperaturas y de sequías que dan inicio al fenómeno de El Niño, un suceso que tiene impactos importantes en sectores como la energía y el agro.

El Fenómeno de El Niño se caracteriza por el calentamiento de la superficie del océano Pacífico oriental ecuatorial, causando alteraciones en sus patrones y se produce, en promedio, entre dos a siete años. En Colombia, sus efectos son notables en el norte de la región Pacífica, los departamentos de la región Andina y región Caribe.

Este efecto no solo es constante en el país, sino que es una condición global como lo muestran informes de agencias internacionales. Según la Organización Meteorológica Mundial (OMM),es la primera vez en siete años que el Pacífico tropical estará marcado por condiciones de altas temperaturas que impactarán durante los próximos meses.

Para el organismo, existe una probabilidad del 90 % de que las características de El Niño sigan prevaleciendo durante el segundo semestre de 2023.

En línea con lo anterior, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) pronostica que la probabilidad de ocurrencia del fenómeno climático alcanza el 80 % para el periodo mayo-julio y el 90 % para julio-agosto y en adelante hasta mayo de 2024.

El fenómeno de El Niño se sentirá con más intensidad en unas regiones que otras. De acuerdo con la Organización Meteorológica Mundial, las condiciones actuales muestran un calentamiento en las aguas del Pacífico Occidental cerca de las costas de Colombia y Perú.

No obstante, en agosto y septiembre habría impactos significativos en déficit de lluvias en América Central, parte del Caribe, y norte de Sudamérica. Chile, el sur de Brasil y Uruguay, por su parte, tendrían más precipitaciones en esa temporada.

Efectos del fenómeno de El Niño en Colombia

En Colombia la persistencia del fenómeno de El Niño tiene efectos particulares en el sector de la energía, ya que la producción de este servicio en el país se da a partir, mayoritariamente, de plantas hidroeléctricas. En junio, por ejemplo, el 80,44 % de la energía que se generó en el país provino de energías renovables y la participación de la hidráulica en este segmento fue del 96,94 %.

Ante los actuales sucesos de elevadas temperaturas, Benhur Palacio, experto de Bancolombia, asegura que en estos casos el respaldo energético se obtiene de las termoeléctricas que funcionan con gas y que entran a apoyar la producción de las hidroeléctricas. De hecho, este año la Asociación Nacional de Empresas Generadoras (Andeg) indicó que las térmicas en Colombia invertirían $1,6 billones para enfrentar el fenómeno de El Niño, que se viene en el país.

Pero a pesar de eso, y dada la participación de las hidroeléctricas en la matriz, ante un fenómeno de El Niño siempre se habla en Colombia del riesgo de apagón. No obstante, para 2023 esto ya está descartado como lo ha dicho en varias oportunidades el Gobierno Nacional.

Otra razón para desestimar un apagón en el país es, como escribió en su más reciente informe la Dirección de Investigaciones Económicas de Bancolombia, que la regulación e infraestructura del país han consolidado un sistema que ha soportado fenómenos mucho más intensos como los de 1997-1998 y 2015-2016, por tanto, ningún experto asegura que se dará un apagón.

Según los pronósticos del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) las precipitaciones disminuirán entre un 10 % a 20 % durante el trimestre consolidado de julio a septiembre del 2023 en varias zonas del país:

• Región Caribe
• Antioquia y los Santanderes
• Región Andina
• Departamentos de Chocó y litoral del Valle del Cauca
• Región Pacífica
• Guainía y Vaupés

Entre tanto, para el trimestre de octubre a diciembre continuaría el desarrollo del fenómeno de El Niño donde se evidenciaría una disminución de lluvias entre el 10 % y cercanos al 30 % en La Guajira, norte de Magdalena, norte y centro de Cesar, Norte de Santander, piedemonte llanero, Arauca, Casanare, Caldas, sur del Tolima, norte del Huila, Chocó, entre otros.

¿Entonces qué pasará con el suministro de energía en el país?

El aumento de la temperatura para los próximos meses y para el 2024 será inevitable, sin embargo, Colombia viene preparándose para asumir la llegada de este fenómeno.

Según datos de XM, en junio el nivel agregado de los embalses de generación de energía eléctrica se ubicó en un 72,43 %, un 7 % por encima del nivel reportado al cierre de mayo de 2023 (65,43 %) y 9,02 % por debajo del mismo mes en el 2022 (81,45 %).

Esto da un parte de tranquilidad frente al tema del apagón, pero expertos aseguran que no se puede desconocer que igual habrá repercusiones en el sector energético y estas se reflejarán a través de las tarifas.

Las tarifas de energía sí subirán y esto dependerá de la exposición de cada una de las distribuidoras/ comercializadoras de la energía en bolsa. Las regiones más afectadas serán Huila, Nariño, Cauca, Santander y Valle del Cauca (Cali).

“El impacto por regiones variaría en función de la exposición a bolsa. En la gran mayoría de regiones, un incremento del 100 % en el precio de la energía en bolsa se vería reflejado en aumentos de la tarifa calculada del 10 %, o menos. En aquellas regiones con mayor
exposición a energía en bolsa, la misma variación implicará un incremento del 15 %. Las variaciones de la tarifa son dinámicas dado que las compañías pueden tener exposiciones diferentes cada mes”, resaltó Bancolombia.

El fenómeno de El Niño y el agro en Colombia

El sector del agro es otro de los que tradicionalmente se ve afectado por los efectos del fenómeno de El Niño en Colombia, pues “se empieza a ver una escasez en el agua y el recurso hídrico es indispensable para el desarrollo y crecimiento de nuestros cultivos y de los animales”, expuso Nicolás Buitrago, experto de Bancolombia.

Gremios como la Federación Nacional de Ganaderos (Fedegán) han manifestado, desde inicios del segundo semestre de este año, que son necesarias medidas de mitigación tempranas para reducir los impactos de estas condiciones climáticas en el sector agropecuario. Y es que de 2010 a abril de este año se afectaron 452.000 bovinos y se ha generado el desplazamiento de 6,5 millones de ellos.

El sector se ha preparado para recibir este fenómeno con medidas de contingencia naturales como reservorios de agua o programando las siembras con los ciclos naturales de lluvia y aprovechando los que se tienen. “Pero el reto será el abastecimiento del recurso hídrico tanto para animales como para los cultivos y que no sepamos con qué intensidad se va a dar y cuánto pueda durar”, dijo Buitrago.

Finalmente, otra preocupación que existe por la llegada de este evento meteorológico es el impacto que se tenga en la inflación del país, pues al dificultarse la producción de los cultivos el precio de los alimentos se encarece.

Hasta el momento, la Junta Directiva del Banco de la República está viendo que las expectativas de inflación de los analistas económicos continuaron disminuyendo y se ubican en 6,4 % a 12 meses y en 4 % a 24 meses. Para fin de 2024 se ubican en 5 % en la mediana de la muestra.

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