Tendencias en “última milla”

Es una iniciativa implementada por la municipalidad de Barcelona desde el año 2014, que plantea el uso de bicicletas para la distribución final de productos en zonas que no son accesibles para vehículos de carga o donde estos tienen restricciones de circulación. (Escala, 2016).

“El piloto ha demostrado con éxito cómo las bicicletas de carga pueden generar nuevas configuraciones para una distribución mejorada de mercancías mejorada. Ofrece a los operadores de transporte un servicio que ahorra tiempo y dinero, a la vez que se reducen los impactos a la ciudad”. (Roca-Riu, 2014).

También en Barcelona se ha diseñado un concepto llamado “supermanzanas”. Son zonas en la ciudad habilitadas únicamente para peatones y vehículos residentes, donde se restringe el ingreso de vehículos de carga durante la jornada diurna para evitar la congestión vehicular y la contaminación auditiva. Además, se estimula el incremento en la cobertura de transporte público y se da cumplimiento a los parámetros de calidad ambiental (Gaete, 2016).

Para complementar estos esquemas, empresas como Amazon han propuesto soluciones innovadoras para las entregas de última milla. Recientemente, recibieron la patente por el proyecto “envío anticipado”, un servicio que pretende enviar los productos a los clientes antes de que estos los hayan comprado efectivamente.

Funciona bajo un modelo predictivo con el que la empresa irá preparando los envíos probables para una zona determinada. En paralelo, se le enviaría información al cliente sobre el producto, con alta certeza de que este lo adquiera para que sea entregado en apenas horas en su domicilio (Pérez, 2015).

Swiss Post, el servicio de correos de Suiza, puso en funcionamiento desde septiembre de 2016 sus robots repartidores, para complementar las actuales soluciones logísticas de entrega que brindan de los carteros tradicionales. Envíos el mismo día y a la misma hora serán posibles con el uso de estos robots, incluso entregas de comestibles y productos médicos.

El robot puede llevar un peso de hasta 10 kilogramos, en un trayecto de seis kilómetros que recorrerá a la velocidad media de un desplazamiento a pie por aceras (Ltd., Post CH, 2016).

Recientemente, Mercedes Benz presentó la Vision Van, una furgoneta especializada para el reparto de última milla. Es un vehículo eléctrico que cuenta con un espacio de carga automatizado y drones de reparto integrados. Está totalmente interconectado con el entorno, puede incluso hacer la planificación de la ruta de entrega de la mercancía.

El fabricante automovilístico espera que, con la entrada en funcionamiento de este vehículo, se aumente la productividad de las entregas de última milla hasta en un 50% (Cadesum Digital, SL , 2016).

Renault ha transformado su vehículo eléctrico Twizy para adaptarlo al transporte urbano de bienes y mercancías. Este fue equipado con un espacio de carga de 1m³ de capacidad, mediante la instalación de una caja colocada en el espacio destinado antes a pasajeros, y montada sobre dos ruedas extras colocadas en la parte trasera. Con esta transformación se espera mejorar las condiciones de entregas urbanas, pues estos vehículos pueden circular donde otros tienen restricciones de movilidad (Cadesum Digital, SL, 2015).