Skip to main content
ico

No hay cumbres sin pasión ni retos sin equipo

Tendencias22-05-2019

Por Edurne Pasaban
Alpinista profesional
Profesora asociada
IE Business School

Edurne pasaban

La montaña y el alpinismo encarnan unos valores que se asemejan enormemente al liderazgo empresarial. Entre ellos destacan la comunicación, la toma de decisiones, la gestión del talento, la motivación o la capacidad de aprendizaje. Valores que debe reunir un líder para conformar lo que será la clave del éxito ante un proyecto: el equipo. No hay que olvidar que un equipo lo componen personas y no partes de un engranaje

La vida y la empresa están plagadas de caminos y vías de exploración. Generalmente, cualquier elección tendrá sus dificultades, pero el proceso será más llevadero si en él predomina la pasión. Este valor es la base de cualquier éxito. Esa pasión debe ir acompañada de ambición, pese a que muchas veces la sociedad encuentre alguna connotación negativa. Ser ambicioso no está tan bien visto como ser pasional, pero lo cierto es que un valor va ligado al otro.

El alpinismo tiene ciertas similitudes con la dirección de una empresa precisamente por todos los valores que rodean a cada expedición y porque cada montaña es un reto o un hito que hay que cumplir. Literal o metafóricamente, toda organización tiene un Everest o un K2 por ascender en su trayectoria. La manera de afrontar este desafío es la clave para poder superarlo.

El rol de víctima y de protagonista

Ser víctima del reto es una de las maneras de posicionarse frente a él. Las dudas y los miedos se apoderan de la situación, nublando completamente cualquier toma de decisiones. En el lado opuesto, la otra forma de encarar el camino es adoptar un rol de protagonista. Evidentemente, el miedo puede persistir, pero en este caso se trata de saber por qué existe tal temor para poder dominarlo; en otras palabras, conocimiento de uno mismo.

Si puedes imaginarlo, puedes lograrlo. Llevar a cabo cualquier objetivo que alguien se plantee está en sus manos. El paralelismo entre el alpinismo y el mundo de la empresa es tan claro como la necesidad imperiosa de contar con el equipo adecuado. Nunca se subirán catorce ochomiles sin un grupo de personas que trabajen en la misma dirección.

 Los grandes equipos atesoran grandes personas

Qué duda cabe de que la excelencia profesional, la cualificación y las habilidades que maneja cada miembro del equipo son vitales en cualquier aventura. Sin embargo, hay otra clave que mejora todos esos factores: los buenos equipos están soportados por buenas personas. Gente que ayuda, arrima el hombro, se sacrifica, se compromete... En medio de las dificultades es cuando afloran estos otros valores para superar un objetivo que es compartido por todos. Liderar equipos consiste precisamente en eso, en hacer a todos los miembros partícipes de una misma meta, por distintas que sean las habilidades particulares.

De esta manera, entre las virtudes de un líder destacan la comunicación, la transparencia, la definición de tareas y roles de los miembros y el mantenimiento de la confianza del grupo, asunto este último nada sencillo, puesto que la confianza se pierde muy rápido y cuesta mucho ganarla. Cualquier detalle puede mermar la confianza en solo un instante.

Los egos y la gestión del talento

En pleno proceso empresarial, en mitad de cualquier ascensión, hay que saber delegar responsabilidades. Incluso el líder debe renunciar a una actividad concreta si alguien del equipo tiene mayores habilidades para llevarla a cabo. En un equipo, la gestión de egos y debilidades es muy importante para superar los obstáculos. Ese ejercicio implica flexibilidad y la capacidad constante de autoaprendizaje. No en vano, todo proyecto es finalmente un proceso de reinvención y aprendizaje de uno mismo porque siempre existen variantes.

Cada reto es distinto del anterior y, de la misma forma, los problemas se presentan de forma inesperada, alterando cualquier plan. Ante esas nuevas situaciones, sigue dominando un concepto por encima del resto: equipo.

Sin miedo al cambio: “cualquier paso puede ser el último”

El italiano Reinhold Messner, primer alpinista en coronar los catorce ochomiles, dijo que “siempre que escalo pienso que cualquier paso puede ser el último”. Quizá sea un pensamiento negativo o apocalíptico, pero también conduce a pensar en la capacidad de supervivencia que tiene uno mismo, así como en la capacidad de mejorar en cada proyecto. El examen y la autocrítica forman parte de un proceso de aprendizaje en la medida en que se facilita la introducción de mejoras para el siguiente objetivo.

Y así surgen los cambios, poco aceptados por algunos y más por otros, pero a todas luces necesarios si suponen factores de crecimiento. Las personas y las empresas, ahora en plena transformación de hábitos y métodos, necesitan su período de adaptación para asimilar los cambios hasta que estos se vean como un medio de motivación.

Efectivamente, surgen dudas y la carga emocional precipita cualquier actitud, hasta el punto de necesitar especialistas para encontrar un sentido a lo que viene. Los amigos y la familia también resultan fundamentales en la búsqueda de este nuevo camino. Por ello, no hay que ir a buscar la motivación en la cumbre de una montaña a ocho mil metros de altura. La motivación, al igual que la confianza que debe generar un líder en su equipo, está en los pequeños detalles. Cada día, cada proyecto… están plagados de pequeños grandes alicientes.

En nuestro especial Desafíos Presentes, Claves Futuras realizado en alianza con el IE Business School, puede conocer más sobre los cambios que está viviendo la sociedad y descubrir la visión de los líderes empresariales sobre cómo adaptar y transformar su empresa para sostenerse y destacarse ante esos cambios.

Regresar al Especial Desafíos Presentes, Claves Futuras

¿Te pareció útil este contenido?

Continúe leyendo

11-04-2019Tendencias

3 claves para destacarse en el actual entorno competitivo

Pensar en el potencial más alto de las industrias para mantenerse vigentes y destacarse en medio de los actuales cambios económicos, tecnológicos, sociales, ambientales y demás parece una tarea difícil. P

10-04-2019Tendencias

Repensar las industrias: clave en un panorama veloz y ágil

Lars-Johan, Presidente de IKEA en conversación con José Ignacio Gafo, Profesor de Marketing en IE Business School nos da su visión sobre como las industrias deben repensar la forma en que llevan a cabo su producción e ideación en un panorama tecnológico que cambia con gran velocidad y agilidad.

12-04-2019Tendencias

El arte propone y la tecnología dispone

Dos sectores aparentemente lejanos como el arte y la tecnología se unen para generar nuevas experiencias y dar un nuevo sentido a las manifestaciones artísticas.

Suscríbase a nuestro boletín
Capital Inteligente

  • Para conocer
    el acontecer económico.
  • Para tomar mejores
    decisiones de inversión.
  • Para compartir
    información de valor.

Lo más reciente

¿No es lo que buscaba? Conozca otros artículos de interés.

Complementary Content
${loading}