Especial Infraestructura: aún nos quedan muchos kilómetros por recorrer

Actualidad economica y sectorial21-11-2018

Una de las grandes herencias que nos dejó el gobierno de Juan Manuel Santos en materia de infraestructura fue el programa 4G con inversiones por COP57 billones, que comparado con inversiones de COP38 billones en Brasil y COP23 billones en México, es considerado el programa de APP (asociaciones público-privadas) de carreteras más ambicioso de América Latina según la FDN. Adicionalmente, se puede resaltar que entre 2011 y 2017 se entregaron 1.400km de nuevas dobles calzadas en operación y se invirtieron COP28.3 billones en vías, incluyendo 13.8 billones que se ejecutaron en los primeros proyectos adjudicados del programa 4G. Pero ¿qué tanto hemos avanzado en el tema y cuáles son los retos que enfrentará el nuevo gobierno?

Lo recorrido en infraestructura vial en Colombia

Según la Cámara Colombiana de la Infraestructura, entre 2010 y 2017 el país tuvo un avance importante en términos de infraestructura, y esto sin tener en cuenta el programa 4G:

Estos logros le permitieron al país avanzar en el ranking de infraestructura del World Economic Forum (WEF), pasando del puesto 93 en 2012-2013 al 87 en 2017-2018. Y en el ítem de calidad de las vías, pasamos del puesto 126 al 110 en los últimos 5 años, sin duda un avance importante, pero no suficiente.

Lo que falta para llegar a la meta

Para lograr una mayor competitividad en infraestructura, el gobierno de Juan Manuel Santos definió como pilar el programa de cuarta generación de concesiones 4G, que apenas está comenzando a ser ejecutado y al cual debe darle continuidad el gobierno de Iván Duque. A través de este programa se han adjudicado 30 concesiones viales (20 de iniciativa pública y 10 de iniciativa privada), de las cuales 22 ya se encuentran en etapa de construcción. Los 30 proyectos suman 4.978km concesionados, que incluyen 574km de vías nuevas (160km en doble calzada) y 609km de ampliación a doble calzada de vías existentes, y contemplan inversiones por un total de COP57 billones, de los cuales COP13.5 billones corresponden a aportes de equity que deben realizar los concesionarios. 

Reto 1: Reestablecer la confianza de los bancos para financiar los proyectos de infraestructura

Los COP43.5 billones restantes de la inversión para los proyectos de vías 4G deben ser financiados por los concesionarios a través de deuda, y es aquí donde se ha visto uno de los grandes cuellos de botella del programa, ya que los cierres financieros estuvieron frenados durante gran parte de 2017, afectados por el escándalo de corrupción que se desató con Odebrecht y que creó un ambiente de incertidumbre en los bancos.

Sin embargo, después de sancionarse la ley de contratación pública (Ley 1882 de 2018) en enero de este año, hemos visto una reactivación importante, pasando de ocho proyectos con cierre financiero definitivo en septiembre de 2017 a 14 actualmente. Dicha ley es un primer paso que brinda mayor tranquilidad al sector financiero para continuar otorgando crédito a estos proyectos, ya que define el cálculo del valor de liquidación en casos de nulidad absoluta del contrato (caso Ruta del Sol II), algo clave para que los bancos puedan recibir los montos adeudados por los concesionarios.

No obstante, creemos que hasta que no se resuelva completamente el tema de Ruta del Sol II no se restablecerá en un 100% la confianza de los bancos, y este será uno de los principales desafíos del nuevo gobierno, ya que aún faltan la mitad de los proyectos por lograr su cierre financiero definitivo, el cual es de gran importancia para poder continuar con la ejecución de las obras.

Reto 2: Poner en marcha los planes de infraestructura nacionales

Además de los desafíos en cerrar el financiamiento de todos los proyectos 4G, la prioridad del gobierno de Iván Duque en materia de infraestructura, según la Cámara Colombiana de Infraestructura, será realizar la pre-inversión del Plan Maestro de Transporte Intermodal (PMTI) 2015-2035.

El PMTI se dividió en dos módulos: el PMTI I que abarca el plan de infraestructura diseñado para potenciar la productividad real del país y su comercio exterior, y el PMTI II que se concentrará en el desarrollo de políticas públicas para consolidar la regulación sectorial, fortalecer la movilidad urbana, la gerencia logística de corredores nacionales y definir la financiación de modos alternos al vial.

El PMTI I se divide a su vez en dos tipos de redes: la red básica y las redes de integración. La red básica se conforma de corredores multimodales entre las principales ciudades y regiones del país, los puertos marítimos y los pasos de frontera. Las redes de integración, por su parte, reúnen corredores regionales y proyectos de accesibilidad de regiones apartadas y con problemas de orden público o pobreza.

De esta forma, el PMTI produjo una lista de proyectos prioritarios a desarrollarse durante dos décadas, con inversiones anuales del orden de los COP10.4 billones.

Con el PMTI se busca entonces que el país alcance altos niveles de competitividad en términos de infraestructura, equilibrando las condiciones de juego con otros países de la región, como Chile y México.

Grandes avances y grandes retos

Sin duda hemos logrado avances importantes en temas de infraestructura en los últimos años: subimos seis puestos en el ranking de infraestructura del WEF, triplicamos los kilómetros de dobles calzadas en operación y duplicamos la inversión en carreteras entre 2011 y 2017, pero aún quedan muchos retos por delante.

El caso de Odebrecht puso un freno en el avance del sector y minó la confianza de los bancos en él; necesitamos tomar acciones que permitan recuperarla, y para lograrlo será necesario devolverles a los bancos el 100% de los créditos otorgados a Ruta del Sol II y establecer reglas de juego claras que le den tranquilidad a la banca para continuar financiando estos grandes proyectos de infraestructura. Además, el gobierno de Iván Duque deberá darle continuidad a los planes estructurados por el gobierno anterior, como el programa 4G y el PMTI, que son ciertamente ambiciosos, pero necesarios para poder elevar la competitividad de nuestro país a nivel internacional.

¿Te pareció útil este contenido?